CC0 Public Domain .Gratis para uso personal y comercial. No se requiere ninguna atribución Fuente: https://pxhere.com/
Érase una vez… Los derechos de autor de las publicaciones científicas y la ciencia abierta.
Este cambio de paradigma en el modo e hacer ciencia, quizás puede ser revolucionario1 pero se trata de recuperar y dar un paso más en la esencia primigenia de la misma, abogando por la supresión de las barreras existente al acceso a esta. Este acceso atañe a todas las etapas o fases de la propia investigación científica (diseño, recolección de datos, revisión, publicación, etc.), como así se recoge en la Iniciativa de Budapest para el Acceso Abierto (febrero 2002) y en la Declaración de Berlín sobre el Acceso Abierto al Conocimiento en Ciencias y Humanidades (octubre 2003).
Hoy en día, la vieja tradición de los científicos y académicos por compartir y divulgación sus hallazgos, fruto de su investigación ha crecido exponencialmente gracias a las nuevas tecnologías que han desarrollado un mundo hiperconectado. La distribución se ha “liberalizado” ya que el conocimiento es más “accesible” que en épocas pasadas.
“La divulgación nace en el momento en que la comunicación de un hecho científico deja de estar reservada exclusivamente a los propios miembros de la comunidad investigadora o a las minorías que dominan el poder, la cultura o la economía”.
Manuel Calvo Hernando
El objetivo de esta forma de entender la ciencia (abierta) no es la despojar a autores o entidades de sus derechos intelectuales, sino la de compartir la información existe para acortar los tiempos y aumentar las posibilidades de éxito en los diferentes campos, ya que,
¿qué sentido tiene poner restricciones a científicos, académicos, investigadores, estudiantes e incluso mentes inquietas que buscan mejoras?
Esta transferencia de conocimiento produce beneficios en todos los agentes2 implicados en la investigación científica, desde las instituciones e investigadores, pasando las entidades financiadoras de investigación, pequeñas y medianas empresas, editores y bibliotecas, hasta que finalmente redunda en la sociedad, a la que capacitará para enfrentarse las complejidades venideras.
«Es preciso conocer al máximo los problemas de nuestro tiempo, pero también las necesidades esenciales del hombre, que no han cambiado, pues el hombre es nuestra principal unidad de medida.»
José Antonio Coderch
Los pilares sobre los que se apoya este movimiento son, por un lado las revistas científicas que responden a la definición total o parcial de Open Access y, por otro, el repositorios, almacenamiento o archivo de trabajos de investigación (pre- o post-print) de forma temáticos o física a los que los usuarios, en general, puedan acceder para su búsqueda y recuperación.
«La Arquitectura es acto social por excelencia, arte utilitario, como proyección de la vida misma, ligada a problemas económicos y sociales y no únicamente a normas estéticas. (…) Para ella, la forma no es lo más importante: su principal misión: resolver hechos humanos»
Carlos Raúl Villanueva
Érase una vez... La ciencia abierta.
Ver post relacionados:
* Esta serie pretende recoger el proceso realizado para poner en marcha la revista científica VAD. veredes, arquitectura y divulgación. Se describirán los procesos realizados, de forma que cualquier lector (o persona interesada) pueda implementar de forma (exitosa) una publicación periódica en formato digital –revista científica o e-p-journal–. Se tratará de seguir el orden empleado pero como todos supondréis algunos procesos son paralelos y/o dependiente de otros.
* * Imprescindible la colaboración que realiza Silvia Blanco, y todos los miembros de forman parte del comité científico, consejo asesor, arbitraje externo y nuestro querido informático DAO.