85 aniversario del maestro Rafael Moneo

Hoy, 9 de mayo de 2022, hace 85 años que nació Rafael Moneo Vallés, el primer arquitecto español en ser galardonado con el Premio Pritzker (1996). Este es solo uno de sus numerosos reconocimientos, entre los que se encuentran el Premio Nacional de Arquitectura y la Medalla de Oro de la Unión Internacional de Arquitectos (1991), el Premio Mies van der Rohe (2001) y el Príncipe de Asturias de las Artes (2012).

Rafael Moneo. Fotografía de Jaime Villanueva

Todo esto refleja su maestría, por la cual forma parte de la colección arquia/maestros¹, producida por la Fundación Arquia como programa consistente en monografías audiovisuales de figuras relevantes de la arquitectura con el fin de que transmitan su pensamiento, de viva voz, a generaciones futuras. En entrevistas conducidas por Luis Fernández-Galiano, se realiza un itinerario cronológico que nos permite conocer su obra:

«El tiempo de Moneo es el tiempo lento de la continuidad, el tiempo perezoso de los hábitos, y el tiempo resistente que permite a la arquitectura envejecer con dignidad: sus obras, el aplomo distraído del que lleva tiempo en el lugar, y persistir en su presencia sin que las inevitables huellas de la edad se agudicen con la obsolescencia simbólica que tanto perturba los edificios levantados con ánimo de dar testimonio de un tiempo fugaz.» Luis Fernández-Galiano 2

 

Antes de arquitecto, Moneo fue un niño que, en Rafael Moneo en diálogo con Antonio San José ³, él mismo describe como intelectualmente inquieto, un chico curioso al que le atraían las figuras de los grandes científicos, de los personajes que pasaban a la historia. Ignoraba entonces que él se convertiría en uno de ellos. Marcado en su paso por el Colegio de los Jesuitas en Tudela, internado que le enseñó también desde un ámbito social, destacó por estar siempre entre las notas más altas de la clase. Indica que la competencia que de algún modo se alentaba allí, ha estado después presente en su vida. Atraído por las letras, participando en la publicación del periódico del colegio y más tarde en una revista, estuvo tentado por las humanidades, pero finalmente su interés por la pintura le acercó, junto con la influencia de su padre ingeniero, hacia la arquitectura.

Ampliación del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida. Fuente imagen: Metalocus

Sus estudios en la ETSA de Madrid, le llevaron a trabajar con Francisco Sáenz de Oiza, quien reconoció el talento de Moneo en sus dibujos, pudiendo participar así en el origen de Torres Blancas. Tras esta experiencia decidió acercarse a Utzon, al que admira, teniendo la suerte de trabajar algo más de un año con él, un período intenso marcado por la Ópera de Sídney ⁴.

«Siempre mantuvo la calma. Tenía esta condición de figura casi heroica (…) El carácter de la obra también tiene algo que ver con su personalidad» Rafael Moneo (Sobre Utzon y la Ópera de Sídney)

 

En 1963 recibió una beca para estudiar en la Academia de España en Roma, lo que se reflejará en su obra posterior. En 1965, de vuelta en España, fue en primer lugar profesor en Madrid y catedrático en Barcelona. En 1973, ya establecido su propio estudio en Madrid, sigue compaginando la enseñanza con el diseño y hasta el día de hoy no ha hecho más que generar arquitectura reconocida por su valor ⁵.

Ver el documental sobre su obra: Rafael Moneo, coraje y convicción en arquia/filmografía.

«Los primeros quince años de ejercicio de la profesión fueron años de actividad intensa: Moneo trabaja, entre 1961 y 1976, en cuarenta y dos proyectos.

Un repaso sosegado y atento a esta secuencia de obras permite hacer varias lecturas. En seguida se advierte el protagonismo que tienen los concursos. (…) También se puede apreciar cómo, rápidamente, llegan los premios, que le ayudan a situarse y a obtener un reconocimiento con el que Rafael Moneo entra, a principios de los años sesenta, precozmente y con firmeza, en la escena arquitectónica española» Carmen Díez Medina ⁶

 

Marina Sánchez Guzmán, redactora Fundación Arquia.

Graduada por la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Málaga y arquitecta por la Escuela de la Universidad Politécnica de Valencia. Ganadora de la beca Arquia en gestión cultural en la Fundación Arquia, gestiona y desarrolla el programa cultural arquia/filmoteca y es redactora de contenidos para el Blog de la Fundación Arquia desde enero de 2022.